25 de octubre de 2011

Acá se pica todo.

Yo sé que el poder de la democracia influye en nosotros como ley madre, que si las masas populares aseguran que algo es así, será así; que si se resuelve algo importante, es porque más de la mitad de una población lo decidió. Pero les voy a contar la verdad, señores. Una verdad que hace horrorizar al gobierno, a los milicos, a los empleados públicos, a los curradores de Remar. Una verdad que todo el mundo quita de su cabeza, por no soportar la idea de admitir que todos, todos vivimos en la insoportable necesidad de comernos los mocos cuando estamos distraídos.

20 de octubre de 2011

Momentos que cualquier persona pasa.

A los 11 años.
Madre: Valentina, bañate.
Valentina: Pero...
Madre: Bañate. ¡Mirá como estás! Todito el día jugando al fútbol.

A los trece años.
Madre: A ver, ¡van dos meses! ¡Dos meses van de clase! ¡Ya tenés 19 faltas! ¿Qué andás haciendo?, ¿te andás drogando vos?

A los catorce años.
Valentina: La verdad que no sé mamá, no sé por qué me decís que soy promiscua.
Madre: Por favor, vergüenza debería darte.

A los quince años. 
Madre: ¿Y esto?, ¿qué es esto?
Valentina: Un cosito...
Madre: ¿Te pensás que no sé lo que es? ¿Por qué mierda tenés una tuca?


Cuando llegás a los diecisiete ya se empiezan a hacer los boludos, y como bobeando comienzan a hablar de sexo, de droga, y se termina ese tabú negativo. 
(Pero las penitencias que te comes anteriormente por ser una pendeja prostituta a voluntad y falopera robabancos, son las peores pesadillas. Y ni hablemos de los almuerzos y cenas que se convierten en un interrogatorio profundo)

11 de octubre de 2011

Agua.

Siempre quise haber nacido con conocimientos innatos del tipo: guitarra (o cualquier instrumento lindo), canto, actuación, o dibujo. Pero no. Nací zurda inútil, en serio. Mi mano derecha la tengo para que mi cuerpo haga equilibrio, y para tener la posibilidad de ganar un poco (pero poquito) más que una persona sin brazo. Soy un gallo cantando, y no tengo madera para actuar. Aunque considero que alguien debería tomar como arte el dramatismo que tengo habitualmente. Digo, yo que sé.
Tengo amigos que tocan instrumentos, que cantan re lindo, que actúan como si toda su vida hubiesen estudiado teatro, o dibujan cosas sin la necesidad de terminar haciendo fosforitos. Los envidio. Los envidio un poco porque los quiero, si fueran sólo conocidos los odiaría.
La otra vuelta un grupo de gente conocida organizó una varieté -con shows de clown, telas, juegos, música, músicos- en un salón todo colorido y lleno de personas artistas*. Me sentía desubicada. ¿Qué le costaba a mi viejo darme un poquito de su voz? No les costaba nada en esmerarse y hacerme prodigia. Capaz que se llenaban de guita y todo.
Además estuve observando, ¿saben lo que ganaría por hacerme la hippie que anda por la vida con la concepción del libre amor? Y otra cosa, habrán tipos que les patina la cabeza (porque son personas sensibles y vulnerables al raye), pero por algún motivo extraño están buenísimos.
Me resigno a vivir como una inútil aburrida, pero por otra parte, agradezco estar bien alimentada de buena música, de libros, obras y películas espectaculares, porque si bien el crédito se lo llevan los artistas, haber nacido para admirar las buenas cosas, no es algo tan fácil.
A los artistas que le patinan la cabeza, gracias.
A los artistas que no son artistas pero que se visten y andan como ellos, los voy a cagar a palos.
A los que están escondidos y en anonimato, gracias.
Brindo por la capacidad de sensibilizar a los demás.


Y hablando de sensibilizar, dejo un tema de Fernando Cabrera que me pone la piel de gallina.
"Agua".



*decir personas artistas es bastante pelotudo. Habían personas de todo tipo, de los buenos, los pseudos, y los don nadie.

4 de octubre de 2011

Razones por las cuales NO se debería ir a la cancha a mirar fútbol.

(Versión mina, canté)

a- los pibes de la tribuna generalmente están divinos y se comportan como primitivos que se comunican con saltos y gritos.
b- la gente parece convertirse en directores técnicos con frases impertinentes del tipo "Fulanito debería ir arriba para que Menganito pueda hacerle un pase a aquél que está mal ubicado porque en realidad patea con la derecha" o "Bien, bien, así los quiero, a los pases. ¡No!, ¿qué hace el cagón ese? ¡Que no la pase!, ¡que patee!"
c- las minas gritan "ídolo" con voz de enamoradas cuando un negrito se pone a correr antes de entrar a la chancha.
d- si el cuadro tiene una buena jugada, se aplaude. Si el cuadro tiene una mala jugada, también se aplaude. ¡A ver gente!, que se ganen los aplausos. No los regalen así nomás.
e- Se perciben hombres involucionados que se paran contra el tejido como Homo Erectus (o Homo Habilis en algunos casos) a gritar cosas del tipo "uoo eeeh vamsjhjj, boopenalhjstch".
f- en la cancha te da el sol de frente, te aturde el constante ataladramiento de bombos, se te acalambra el ojete el asiento incómodo, o puede hacer frío o calor al mismo tiempo. Por eso, señores, la televisión y la comodidad de sus hogares es la forma más correcta (para la seguridad de los civilizados) de mirar un partido de fútbol.

Ah, y con esto del HD (jai definishions), no sé si los jugadores están saliendo maquillados o qué, pero parecen más lindo por pantallita que a simple vista.