Recién metí la pata.
Recién lastimé a alguien.
Recién me odie un poco.
Recién no funcionó ningún método para dar vuelta la situación.
Recién me sentí culpable. Recién me sentí un poco vos.
Recién fui hipócrita.
Recién te conté la verdad.
Recién dejé de ser la "victima".
Recién terminé de hacer un montón de estupideces en menos de treinta minutos.
Ahora perdí el significado de la palabra ·recién· por haberla repetido un montón de veces.
Que bárbaro che, te voy a tener que poner un gps para rastrearte antes de que te mandes cagadas. Si se te desarma el rodete, soy yo dándote señales.
ResponderEliminarY si eso pasó "recién", no te preocupes, recién dura poco.
Abrazo que te deje morada.
jaja, que lindo lo que escribiste, gracias por pasar por el mio, un besote!
ResponderEliminarRecién viviste todo!, te falta sonreír y ya no te perdiste nada.
ResponderEliminarSalud!
jlg
bueno!
ResponderEliminardespués de todo recién fue bueno!
y de la estupideces se aprende, supongo -a veces no aprendo una mierda, pero qé te puedo decir?-
ResponderEliminarfuerza y que si no te mata, te fortalezca :)
Es impresionante como en dos segundos, o sea recién, se puede ir todo al carajo jaja
ResponderEliminarmenos averigua dios y perdona...
ResponderEliminardijo un señor muy viejo con unas alas enormes:
i smile when i’m angry. i cheat and i lie.
i do what i have to do
to get by.
but i know what is wrong,
and i know what is right.
and i’d die for the truth
in my secret life.
salú!
y buena vida...
f
ps: recién es pasado...
Recién te acabo de leer Vale.
ResponderEliminarEstá bueno dejar de ser la víctima.Me puse seria :(
Beso!
Andre, casi nunca meto la pata en éste tipo de cosas, ayer me frustré tanto que terminé haciendo la chotada llorona de esta entrada.
ResponderEliminarFernecito, bueno.
Joe, ahora si estoy apta para sonreír.
Jorgelina, y si, la verdad se dijo, medio tarde, pero se dijo.
Sophie, se aprende de cualquier estupidez, por suerte.
Ro, es increíble.
f, tenés razón. Qué linda canción, hombre.
Caro, ¿vos seria?, en serio, no me mientas así.
A todos, abrazos.
Recién lo lei (y bueno, tanto leerlo ... jajaja) y nunca falta ese día donde en un ratito te mandás mas mocos que en un mes entero. Pero todo tiene arreglo :)
ResponderEliminarEstaría genial poder seguirte, sobre todo porque después parece que no me importa pasar pero es que se me complica acordarme hasta del blog de mi vieja!
ResponderEliminarjlg
Es decir que intento seguirte pero parece que a blogger le parece que el "request is too large", vaya a saber porque no puede tolerar un click, pero como decís por ahí "Suave si le dan click porque se cae", en fin intentaré mas tarde.
ResponderEliminarSaludos!
jlg
Joe, creo que le estas errando. Yo cuando quiero seguir a alguien voy a donde tiene los seguidores y arriba dice "seguir". Y si eso no funciona arriba, en la página dice "seguir". A lo que vos le das click es a la comunidad bló, que no tiene nada que ver.
ResponderEliminarGran Lady, es verdad, si no tenés un día así, no tenes vida. (¿?)
Y si todo fue recién, por suerte duró poco y terminó. Aliviate de las frustraciones, ya podés ser feliz (?¿)
ResponderEliminarsomos la suma de todas nuestras metidas de patas dice Galeano
ResponderEliminarBianca, fue un momento de catarsis. Ahora volví a la pelotudez de siempre.
ResponderEliminarGastón, y tiene razón. Creo.
Recién acabo de pasar por su blog, y si bien leí varias entradas, poco es el tiempo que dispongo.
ResponderEliminarVolveré entonces.
saludos
A veces es bueno ponerse del otro lado para entender un poco más a los otros. Igual no creo que haya sido para tanto. Está bueno leer una entrada en la que no le das palo a tu novio, para variar.
ResponderEliminarMr, con gusto serás bienvenido.
ResponderEliminarWillian, no me puse del otro lado. En realidad sentí la mierda que puedo ser a veces con otras personas. No entendí a nadie. No fue el fin del mundo, pero en su momento jodió, y el blog me sirvió de catarsis.
Y en esta entrada comprobas que no le doy palo por amor al arte, sino a la situación que se merezca.
Te amo.
ResponderEliminarWow, Willian. Qué alegría.
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